El seguro de Caser para mascotas me salvó

Hace unos meses, mientras paseaba a mi perro, un pastor alemán grande y fuerte, tuve una experiencia que me hizo valorar aún más el seguro de responsabilidad civil de Caser para mascotas. Soy una chica joven y delgada, y ese día mi perro se puso nervioso al ver a un motorista de reparto. De un tirón brusco, me lastimó la mano y se escapó, provocando que el motorista cayera de la moto y sufriera lesiones graves que le hicieron perder la movilidad de dos dedos de la mano, dejándolo sin trabajar durante más de un año.

Gracias al seguro de Caser, se cubrieron todos los gastos legales y la indemnización de 190.000 euros al motorista. Se hicieron cargo de todo de manera rápida y profesional. Sin este seguro, no sé cómo habría afrontado una situación tan complicada. Agradezco haber asegurado a mi mascota con Caser.

Caser WeCan CHECK, un apoyo indispensable para mi mejor amigo

Soy un hombre de 65 años, viudo, y mi perro mestizo de seis años es mi principal compañía, ya que mis hijos viven en el extranjero. Hace dos años contraté el seguro Caser WeCan CHECK, y aunque al principio solo lo usaba para las vacunas, todo cambió cuando mi perro se intoxicó al comer hierbas con pesticidas en el campo, desarrollando problemas graves de estómago e hígado.

Desde entonces, ha necesitado múltiples visitas al veterinario, pruebas y hasta una hospitalización. Gracias a Caser, pude cubrir todos estos gastos, que sin seguro habrían sido cinco veces más altos. Con mi pensión, habría sido imposible afrontarlos. Agradezco cada día haber contratado Caser WeCan CHECK; sin él, mi perro no habría recibido la atención necesaria.